11.4.09

02:53

Ya sé que hoy no llamas. Aún si fueras a hacerlo ya es tarde. Pero, ¿qué importa que ya no te quiera? Dios no ayuda pendejos ni endereza jorobados.

- Allá tú y tus ganas de irte lejos. Allá tú y tus ganas de extrañarme.


De todas maneras voy a dejar el teléfono pegadito a mi almohada, por si suena.

1 comentario:

Anónimo dijo...

también lo dejaré cerca por si llamas...