Empieza a hablar, no sé quien, alguien.
Hablas tú también, luego te vas
...
10.12.07
9.12.07
Tierra de nadie
es de altanería"
Gil Vicente
Esteban dormía profundamente cuando Lucio lo destapó avisándole la hora de partir. Tratando de no hacer ruido, el niño se incorporó entre bostezos. Alcanzó sus huaraches y, ligeramente más despierto, se despidió de su madre con un tímido beso en la frente. Tapó a su hermana y corrió a buscar a su papá. Salió aprisa de su casa, pensando que le había tomado ya alguna ventaja.
20.11.07
Hacer lo fácil
No es fácil acercarte a un nuevo amor. Ya no hay quien diga: "ella" y después vaya atrás de su dedo a decir lo que quiere. Nadie sale de su casa y anda por ahí, por algún lado, hasta que encuentra lo que querrá buscar... "los amorosos... no encuentran, buscan". Lo que digo es todo menos andar de baboso en una nube. Las cosas deberían (porque yo lo digo) ser más fáciles, con menos cliché 'ahí en medio'. La gente debería salir, de donde sea que implique un dentro, y cantar y llorar; hacer todo en medio de todos. Deberíamos ir allí a donde hay más gente, a conocernos, a aprender las cosas más complicadas de la vida como comer o dormir. Es preciso entender que ya sabemos mucho de lo fácil: "Mamá, tengo hambre".
¿Por qué no hacemos fácil lo demás? "Oye, ven, ya me cansé de esperar", "Vámonos de aquí"... Amanecemos solos y solos somos en nuestro andar. Envejece uno todos los días, y lo hace solo. Hace falta creernos eso de que queremos envejecer con alguien, eso de aprender a vivir de otros. A lo mejor así creeríamos otras cosas que ayudan al descanso. A mí me ayudaría a creer en un dios, en mi mujer; definitivamente me ayudaría a tomarme enserio.
Habrá que buscar, siempre, a quien decirle todo; a quien pensar indefinidamente
10.11.07
Suspiro
Instantes
-la más lenta de mis muertes-
regalarte mis dedos en un ramo,
guardar tu olor en estas flores.
Quiero sacarte de la tumba,
para enterrarte bien,
para verte enterrada.
Somos la despedida perpetua,
el minuto más longevo,
la mirada que marchita
Déjame escribirte,
ya sé que no te entiendo,
que más vale no hablar,
que no sirve, que no estás.
Eres el más largo de mis días
la palabra más dulce,
el instante que no acaba.
8.11.07
¿Cómo dices que dijo que dijiste?
¿Por qué, cuando alguien deja de querernos, no nos repite(n) 1268 veces que ya no nos quiere? Sí, sí, no entenderíamos (o cuando menos yo no), pero que importa entender eso que ya no es. Lo que importa, creo, es aprender a verse solo, de a poco cuando menos, y cuando es necesario, preciso (más a fuerza que de ganas, a fin de cuentas necesario). Hace falta sabernos, de sabor pues, por si un día nos escriben, una carta o un cuento, por si un día nos quieren -de nuevo o de primer momento.
Descifrando,
Manos bizcas, torpes,
de intenciones cruzadas,
de dedos enterrados,
-enterrándose más-
Aquí y en todos lados,como el aire, necesaria,
a la hora de la comida,
a la hora del sueño
Duermes con los ojos abiertos,
igual que el odio, plena,
dueña de ti misma,
de todos tus templos
Dueles todo el tiempo,
como el silencio, muda,
sorda de ti misma
-yo sordo de ti-
29.10.07
Retrato
Asfixia de los ojos
de pestañas afiladas.
Vaho de tu sed
de labios lacerantes.
luciérnagas de ojos
preñados de noche.
de nubes derramadas,
de mariposas y miradas
Recuerdos
Vienes de mis manos,
de donde se nos acaba el aire,
del frío y mi primer llanto.
tejiendo el frío,
el nudo que traes en la mirada.
afilando sonidos, silencios,
desbaratándonos en tiempos.
te desnudas, desdoblas,
te haces aire, aire de noche,
azufre sin huesos,
ceniza y recuerdos.
cuando yacemos en tus ojos de ciega,
vestidos con sombras, lloviendo en miradas.
inevitable, a gritos,
con hambre de amor y de mí,
de todo lo cierto que somos,
con todo lo muerto que estamos.
como el lugar donde no estás,
como nace el agua en silencio
cuando el tiempo se olvida del tiempo.
olas de tierra y nostalgia:
un suspiro, leche y nada.
En medio de las letras,

Voy a escribirte,
al final del primer renglón,
empujarte y verte quebrar en pedacitos.
amontonar palabras y besos y despedidas también
-Quiero que te quedes allí, escondida de nosotros-
y tú renaciendo a cada rato,
el blanco que separa párrafos.
quiero sacarte de los espejos,
de adentro de mis adentros.
a tirarme de un renglón más alto.
Yo quería inventarte unos labios nuevos,
Pero tú nada más estas ahí, tirada y toda rota.
Empezando
A momentos publicaré cuentos, poemas, opiniones... y no sé que más, pero escribiré.